Los primeros nazarenos se acaban de recoger. Ahora se estarán comiendo un bocadillo que si la torrija anuncia la llegada, el bocadillo confirma que se marcha. Y es que con la primera en la calle, ya no hace falta que salga la Borriquita para tomar conciencia de que esto se acaba. El Señor de las Penas, la Virgen del Rosario, la de la Unidad y la de las Angustias y el Cristo del Mar, el de la Buena Muerte y el de la Caridad: siete imágenes como siete dolores han transitado la certeza de que esto se nos escapa de las manos.