Domingo de Pasión, del Pregón este año (que antes no), de viaje y de entrega de partitura a los pies de la Virgen de los Dolores. Mater Dolorosa, de Pulido, un año después. La conversación entre el Director espiritual, el señor Martínez y el señor Vílches discurre cordialmente, ajenos al murmullo de la iglesia. Acaba de terminar uno de los días del Septenario, homilía decidida y vídeo pixelado a más no poder. Presencia testimonial más voluntariosa que otra cosa, recuerdo de la tarde. El Presidente con la imagen, el agradecimiento de la Hermandad que es bella fotografía enmarcada de la Soledad. Qué bien se nos recibe en la Soledad siempre.