sábado, 26 de noviembre de 2005

La corneta, esa famosa desconocida

Manuel López Farfán daría gran protagonismo a este instrumento en sus composiciones; hasta tal extremo que sin ser innovación a él debida, se le identifica y reconoce como tal. Para valorar en su justa medida este hecho, acudimos a un profundo conocedor de este “desconocido” instrumento; para conocer de primera mano las virtudes, las carencias y los defectos de este instrumento que Farfán nos “descubrió” para la música procesional.

Por Enrique Pérez Martínez
Director musical Banda de cornetas y tambores Santa Cruz. Almería

Desde hace muchos años se utiliza la corneta y a pesar de tanto tiempo transcurrido sigue siendo un instrumento desconocido respecto a la técnica, interpretación y su construcción.

La construcción de la corneta hace que su interpretación en perfecta armonía sea bastante más difícil de lo que debiera ser. Desde hace pocos años, los que nos dedicamos a este mundo de la música cofrade hemos empezado a buscar una mayor calidad en la interpretación y yo, en lo personal, he llegado a al conclusión de que la corneta está mal fabricada. Por eso, si comparamos una pieza interpretada por trompetas y otra por cornetas siempre será más fácil de afinar la tocada con trompetas que, por lo tanto ofrecerá un sonido mas exacto en sus tonos y semitonos. Aunque en estos últimos años muchos músicos se han preocupado de estudiar mas a fondo la corneta para sacarle mas provecho y remediar dentro de lo posible sus defectos.

Una corneta mezclada con otros instrumentos ya sean metales (trompetas, fliscornos, trombones, tubas, etc.) o maderas (clarinetes, saxos, etc.) requiere una interpretación muy cuidada especialmente en la parte de afinación; más incluso que cualquier otro instrumento.

Fijad siempre el oído y os daréis cuenta de esto especialmente en las agrupaciones musicales y en bandas de música ya que la mezcla de tantos instrumentos hace muy complicada una perfecta afinación con el resto de instrumentos, sin embargo, en una banda de cornetas y tambores no se nota tanto este defecto debido a que la variedad de instrumentos de este tipo de bandas no es tan amplia y se camufla más este fallo de afinación.

En cuanto a la técnica de la corneta, en mis años de estudio del instrumento he podido comprobar que es muy parecida a la técnica de la trompeta, variando tan sólo en algún pequeño detalle.

En mi opinión, por ahora no incluiría este instrumento en bandas de música mientras no se arregle este grave problema de afinación; las partituras de la corneta en una marcha de "palio" pueden ser interpretadas por una trompeta o fliscorno si mucha dificultad. Pero los “papeles” de una corneta en una agrupación o banda de cornetas son bastante mas difíciles para una trompeta debido a la tesitura tan aguda que utilizan, sobre todo, las bandas de cornetas y tambores.

El mayor error de un músico es pensar que este instrumento requiere de una interpretación distinta; la corneta es un instrumento con un timbre especial, más conocido como “quejío” y, por lo tanto, en mi opinión, no necesita exagerar los matices de partes fuertes.

Como resumen, la corneta siempre se ha tocado sin estudiarla y sus defectos se pueden corregir bastante. Llevo muchos años dedicados a este instrumento aunque parezca que soy un detractor en cuanto a mis opiniones. No es así. Para mi es parte de mi vida y una de mis mayores ilusiones el poder tocar la corneta e interpretar música cofrade.